martes, marzo 29, 2011

MERCADOTECNIA




Desde luego que hay que recordar al Maratonista Abebe Bikila, conocido como “La leyenda de los pies descalzos”.


Que triunfó en los juegos olímpicos de Roma en 1960, y Tokyo en 1964; en ambos casos batió las marcas mundiales. Lo reconocen como “héroe nacional en Etiopia”. Desde su infancia corría en los montes y llanuras ya que ayudaba a su padre en su trabajo de pastor. En su adolescencia ingresó al cuerpo de la Guardia Imperial y ahí empezó a entrenar. En 1956 participó en el campeonato de las fuerzas armadas ganando el maratón y batiendo los records de las competencias de 5000 y 10000 metros.
En los Juegos olímpicos de México en 1968, corrió el maratón pero se retiró en el kilómetro 15. En 1969 tuvo un accidente automovilístico quedando cuadripléjico y falleció cuatro años más tarde debido a una hemorragia cerebral.
Es muy interesante saber que en el maratón de Roma, corrió descalzo, aunque ya en el de Tokyo utilizó unas zapatillas marca Asics.
En relación a este Deportista, actualmente hay algunos estudios que mencionan que correr descalzo ocasiona menos lesiones y menos cansancio muscular en las piernas y pies principalmente. Sin embargo, los entrenadores toman en cuenta muchos factores para elegir los zapatos de sus atletas, como son el tipo de competición, la constitución del atleta, el tipo de pisada, musculatura, peso, talla, etc.
Antes, no se estudiaban tanto estos temas. En mi adolescencia no teníamos entrenador, y solo participábamos en el atletismo sin conocimiento alguno, los zapatos que utilizábamos eran los que podíamos comprar, y no nos interesaban las lesiones, deformaciones o secuelas que pudiéramos tener. Recuerdo una marca de zapato deportivo “Dunlop”, que eran muy simples, pero bonitos, no tenían tacón elevado, no tenían suela especial, y teníamos que ahorrar algunos pesos para poder adquirirlos. Esos fueron los primeros zapatos de marca que adquirí. Había otros sin marca, blancos, que se utilizaban también en las actividades “deportivas” escolares.
MERCADOTECNIA:
En la cuestión de los zapatos deportivos y no deportivos, ahora interesa mucho “vender”, y poco les interesa a los fabricantes el saber que es mejor andar descalzo o correr descalzo. Y aparecen marcas, y marcas, y estilos, y estilos, y cada vez más caros. Y hay que tener cuidado de no caer en esas trampas, que la publicidad menciona. Por ejemplo: Ha salido un calzado (Slimmin Clogs) que sirve para bajar de peso de una manera simple y efectiva. Tienen la forma de los clásicos zapatos Suecos, y son de suela más alta en la punta que en el talón, su diseño hace que el pie se ponga en una cierta posición que simula el movimiento que hacemos cuando hacemos escalada en el gimnasio. Tan solo al dar unos pasos por las calles estaremos haciendo el doble de Ejercicio. Pero la maravilla de los Slimmin Clogs, no termina ahí, ya que además aseguran que ayudan a combatir la celulitis y permiten una mejor circulación de la sangre. Actualmente tienen un costo de 12 Euros el par.


Otra marca, la Fit Lop, lanza un zapato con una capa en la suela que al utilizarlo gasta un 15% mas de energía, y con esto, mayor cantidad de calorías quemadas, como si esto fuera poco, ni siquiera se sienten al caminar, por su tecnología, dan la sensación de andar descalzos.. Además ayudan a tonificar piernas y glúteos y reducen los dolores de espalda o articulaciones.



Los Fabricantes de zapatos,,, JAMAS VAN A RECOMENDAR HACER EJERCICIO SIN CALZADO, O SEA DESCALZOS. QUIZA ALGUNOS ENTRENADORES, Pero ya los entrenadores sabrán de acuerdo a sus atletas, cuál calzado recomendarles, tomando en cuenta la amortiguación (cushioning), la estabilidad (stability), el control de movimiento (motion control), calzado ligero de entremaniemto (light weight trainers, performance trainers), calzado para competencias (racers, racing flats) e inclusive zapatos para todo terreno (All terrain, trail shoes)
En el calzado deportivo y otras tantas cosas, la mercadotecnia utiliza en la mayoría de las veces argumentos falsos para poder vender.
MICHAEL MURPHY.

viernes, marzo 11, 2011

ESTRES, ANSIEDAD E INSATISFACCION

El estrés, la ansiedad y la insafistacción son
problemas que empezaron a escucharse muy frecuentemente desde el inicio de este siglo. No quiere decir que antes no existían, pero por ejemplo, la palabra estrés, llegó a nuestros oídos como algo nuevo en los años sesentas, palabra que significa en el idioma inglés “tensión” y que se define generalmente como una reacción fisiológica del organismo en el que entran en juego diversos mecanismos de defensa para afrontar una situación que se percibe como amenazante o de demanda incrementada.

Inclusive había la duda de cómo se escribía esta palabra cuando en México se empezó a adoptar, como otras muchas palabras extranjeras que las utilizamos hoy en día. Cuando se escribe Stress, la definición es otra ..... Stress: "Experiencia interna que crea una desbalance psicológico en el individuo y es el resultado de factores del ambiente interno, la organización donde trabaja o las personas que le rodean”

Seguramente habrá quien diga, que está mal la definición, y que también está mal escrita la palabra, incluyendo psicólogos, y psiquiatras. Pues inclusive los autores científicos tendrán diferentes conceptos. Se ha estudiado mucho el estrés, se ha clasificado, se han involucrado sustancias como la Serotonina, la Adenalina, la Noradrenalina, la Dopamina, como desencadenantes y responsables y se habla del estrés laboral, el estrés familiar, y hasta del estrés premenstrual.

Hay múltiples artículos, revisiones, estudios, para tratar este problema que todos lo mencionan a diario, incluyendo ahora los niños que dicen con frecuencia. “es que estoy muy estresado”.
Y ya todos sabemos que con estrés pues no podemos funcionar adecuadamente. Esto nos incomoda, nos afecta, nos deprime, y se nos viene el mundo encima.

El estrés está ligado a la Ansiedad, que significa “angustia, aflicción” y esta palabra sí era antes conocida. Nuestros padres no manejaban la palabra estrés, ellos se sentían angustiados, o preocupados cuando tenían algún problema, y por lo general los problemas los trataban de resolver sin quejarse mucho, como ahora: “estoy muy estresado, esperaré que se me pase”
En la vida tenemos muchos estímulos externos, que nos ocasionan emociones agradables y desagradables. Siempre la humanidad ha tenido emociones agradables y desagradables, y las personas tenemos sufrimientos de menor o mayor intensidad. Nadie quiere tener sufrimientos, nadie quiere tener sensaciones desagradables, y todos buscamos lo contrario.

Pero ahora se observa mucho más que antes, la INSATISFACCION. Desde la infancia, los niños ya dicen: “ESTOY ABURRIDO”,,, bueno no se les puede decir lo que un gran maestro escribió: “aburrirse es besar a la muerte” (Ramón Gómez de la Serna), pero es entendible que los niños utilizan ahora palabras que significan INSATISFACCION. Qué es lo que quieren?,,,, quieren sensaciones agradables, placenteras, y quieren SATISFACCION, pero quieren que algo les proporcione eso, ya sean personas, máquinas, televisión etc. No quieren hacer esfuerzos.
Los adultos están llenos de insatisfacciones, porque están inconformes con lo que son, o con lo que tienen, y buscan constantemente los placeres, la opulencia, la distinción; buscan estar por encima de los demás, quieren ser diferentes a “los de abajo”, quieren ser humanos pero diferentes. Quieren dinero, (pero en ocasiones no saben para qué) todo pensando en ellos mismos y poco en sus semejantes.

Todo esto mezclado con la ansiedad, de no estar bien consigo mismos.
La insatisfacción obliga a actuar de una manera u otra. Muchas veces buscando precisamente la satisfacción por medios no muy saludables y por lo general pensando egoístamente. Los medios no saludables son desde luego el alcohol, las drogas, y las actividades que solo hacen perder el tiempo.

La insatisfacción, como el estrés, como la ansiedad, se corrigen sin medicamentos; Tan solo cambiando la actitud frente a la vida. No es fácil, sin embargo hay que apreciar que respiramos, que tenemos alimentos, que los alimentos simples nos satisfacen, que tenemos un techo, y tenemos personas que nos quieren y que queremos, son satisfacciones que pueden ser muy grandes y que nos pueden aliviar de las enfermedades raras mentales, psicológicas que derivan de LA INSATISFACCION.

¿Qué queremos? Tenemos más satisfacciones que insatisfacciones? Nuestras satisfacciones son verdaderas, o constantemente queremos nuevas? O nos conformamos con lo que tenemos? vivimos en constante insatisfacción? Nuestra insatisfacción es crónica?

Los invito a la reflexión como siempre.
Su Amigo: MICHAEL MURPHY