viernes, mayo 24, 2013

Profesionales de la Salud (Reflexiones)



Los médicos y enfermeras son profesionales de la salud que dentro de sus actividades, la atención a los enfermos es lo más importante durante el proceso de las múltiples patologías que una persona puede presentar. Su trabajo es muy variado así como las enfermedades. 

Hay enfermedades menores que son temporales, no trascienden en la salud a largo plazo y no ocasionan secuelas en las personas y hay enfermedades incurables, invalidantes y mortales, que requieren más atención.

Las diferencias que hay entre el trabajo del médico y el trabajo de la enfermera son evidentes, pero la responsabilidad es igual, ya que ambas actividades se hacen con el mismo profesionalismo.

Dentro de las diferencias que existen en el trabajo de estos profesionales está la actitud frente a los enfermos. Por ejemplo: Un médico que hace una intervención quirúrgica intestinal, se preocupa por que la técnica sea adecuada y eficaz, y en el postoperatorio vigila al paciente en el hospital y después en su domicilio para detectar complicaciones vigilando toda la convalecencia hasta que vuelva a su vida “normal”. Es una actitud más fría en relación que las atenciones de la enfermera.  La enfermera vigila que las indicaciones médicas se lleven a cabo, pero además toma en cuenta el bienestar integral del enfermo, ayudándolo a que tenga comodidad, manteniendo una relación más afectiva y cálida. La enfermera puede saber de la fisiopatología de una neumonía y también el tratamiento, pero el abordaje frente a un paciente con este problema se relaciona más con la vigilancia de la función respiratoria, y su rehabilitación.

La enfermera atiende al enfermo desde el punto de vista de su respiración, su manera de comer, de beber, sus evacuaciones, la movilización, su temperatura corporal,  la manera de dormir del enfermo, el cuidado personal, la comunicación, el vestuario. Aspectos que el médico por lo general si considera, pero no atiende de manera tan cercana.
El trabajo de los médicos y enfermeras es diferente desde varios puntos de vista. Pero la responsabilidad y el valor de estas actividades son iguales.


MICHAEL MURPHY






jueves, mayo 16, 2013

EN AUMENTO, LOS HOGARES CON JEFATURA FEMENINA

Boletín UNAM-DGCS-288
Ciudad Universitaria.

06:00 hrs. 9 de mayo de 2013




Las mujeres representan 25 por ciento de la Población Económicamente Activa del país, aseguró Julia del Carmen Chávez Carapia, de la ENTS de la UNAM, con motivo del Día de las Madres
En México, 25 de cada 100 hogares tiene jefatura femenina. Ellas, solteras, separadas, divorciadas o viudas, deben incorporarse, en su mayoría, al sector informal del mercado laboral, que ocupa a más del 60 por ciento de los trabajadores en el país.
Cada día, desempeñan una doble jornada de trabajo, al ser las proveedoras principales o únicas de los gastos de la casa, estar a cargo del mantenimiento y limpieza de la vivienda, y el cuidado de niños y adultos mayores, entre otras tareas.
Son marginadas socialmente. Están catalogadas de manera despectiva, al no ajustarse al estereotipo tradicional de que una mujer, para realizarse, debe casarse y sólo dedicarse a sus hijos, esposo y casa, aseguró Julia del Carmen Chávez Carapia, de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM, con motivo del Día de las Madres.
Las mujeres representan el 25 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) del país. En los últimos años, han asumido estas responsabilidades más jóvenes, subrayó la también coordinadora del Centro de Estudios de la Mujer de la ENTS.
Según cifras oficiales, 63 de cada 100 hogares con jefatura femenina son encabezados por mujeres de entre 30 y 59 años; 9.5 por ciento, de 12 y 29 años, y el 26.9 por ciento, por féminas mayores de 60 años.
Las proveedoras suman a sus jornadas laborales el tiempo dedicado a tareas domésticas que, en promedio, les requieren 42 horas por semana. En México, el año pasado 97 por ciento de ellas realizaron trabajo del hogar, refirió.
Jefas de familia
En el 2000, 18.9 por ciento de los hogares tenía jefatura femenina, proporción que ha aumentado al 25 por ciento, y la cifra crece.
Esto se explica, en parte, por el aumento de los divorcios en el país. Al no contar con recursos suficientes para solventar los gastos, tienen que incorporarse al mercado laboral, explicó.
En el sector formal, la mayoría se inserta en plazas dedicadas a prestar distintos servicios. Aún con estudios profesionales, son contratadas en los puestos con menores ingresos, pese a que por ley deben ganar lo mismo que un hombre al desempeñar las mismas tareas.
Ante la falta de oportunidades, se incorporan al sector informal, tanto al comercio ambulante como a la venta de alimentos. Para sostener a sus familias, colocan puestos de tamales, quesadillas, elotes y otros productos, incluso en la entrada de sus casas, o se dedican a las ventas por catálogo de mercancías.
La experta subrayó que, en todos los hogares, las trabajadoras dedican la totalidad de sus ingresos a los gastos de la familia y sólo en casos extremos los utiliza en cuestiones personales.
Fecha de reflexión
Respecto a la celebración del Día de las Madres, consideró que reafirma un estereotipo tradicional que limita a las mujeres. Se les ubica sólo como madres, esposas y amas de casa. “A la vez que reconoce este papel tradicional, es un día de carácter comercial. Para festejar, es necesario comprar”.
La fecha constituye una oportunidad para reflexionar acerca de las condiciones de vida de las relegadas a ser amas de casa, sujeta a las decisiones de su esposo o pareja, concluyó.

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Recopiló:    Michael Murphy

domingo, mayo 12, 2013

LOS ANTIOXIDANTES


 

Las substancias conocidas como antioxidantes,  se venden en forma de complementos alimentarios y los procesadores y fabricantes para aumentar sus ventas muchas veces ofrecen los productos como maravillosos para evitar las enfermedades y mencionan inclusive que  entre más antioxidantes se ingieran mayor será la salud de las personas.
Estas substancias abundan en los alimentos y hay miles de diferentes antioxidantes. Algunos son minerales y otros son enzimas, que son moléculas de proteínas que facilitan las reacciones químicas necesarias para que las células funcionen correctamente.

Tienen la capacidad de bloquear la acción de los radicales libres, (fragmentos químicos inestables que pueden causar estragos en componentes saludables en las células del organismo). Los radicales libres pueden ocasionar daño interviniendo en el crecimiento y reproducción normal de las células. Se ha comprobado que estos procesos (formación de radicales libres), juega un papel importante en las enfermedades crónicas como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, la enfermedad de Alzheimer, el Parkinson, las cataratas y otras. El mismo organismo genera antioxidantes para neutralizar a los radicales libres, y hay factores como el tabaquismo, el alcoholismo, la exposición a la luz solar, los químicos ambientales como los pesticidas que desencadenan la producción de más radicales libres.   Hay alimentos que especialmente contienen antioxidantes, como son las frutas, verduras y granos enteros.
Hay algunas vitaminas que son antioxidantes, como la vitamina C y la vitamina E. Y muchos antioxidantes ejercen mejor su acción en combinación con otros (efecto sinérgico) por lo que se ha aconsejado por los expertos que se ingiera una amplia variedad de frutas, verduras, cereales integrales y legumbres disminuyendo  así el riesgo de ciertas enfermedades en relación a las personas que no consumen variedad de alimentos.

El enfoque es consumir variedad de frutas, y no solo las que han llamado “superfrutas” como las granadas, el kiwi etc. Y en realidad no es necesario ingerir “suplementos”, más bien los antioxidantes que necesitamos están en los alimentos. Los abusos de suplementos pueden causar daño, por ejemplo la ingestión de selenio de 200 microgramos al día se ha relacionado  con una mayor incidencia de recurrencia de cáncer de piel (no melanoma) en personas que previamente lo han padecido.
El exceso de antioxidantes en forma de “suplementos” puede ser problemático. Cuidado con las tiendas de vitaminas que ofrecen cápsulas de “multi antioxidantes, a “mega dosis” porque tomando estos en grandes cantidades y por tiempo prolongado, se pueden convertir en pro-oxidantes, que aumentan la producción de radicales libres, especialmente en las personas que beben alcohol o fuman.

Comiendo exceso de frutas no es tan dañino, pero algunas veces hay efectos no deseados por ejemplo la ingestión de grandes cantidades de zanahorias u otras verduras ricas en beta-caroteno pueden ocasionar una coloración anaranjada de la piel.
Los productos comerciales precisamente son “comerciales”, y los fabricantes  añaden “antioxidantes” a su mercancía, para aumentar las ventas, agregando vitamina E ó Zinc por ejemplo, pero algunos de estos productos tienen otras substancias perjudiciales como exceso de azúcar o de grasa. Las almendras tienen vitamina E, y el Zinc se encuentra en la carne de res magra (sin grasa). Es mejor ingerir alimentos naturales y en forma variada que consumir productos procesados,  químicos “suplementos” que pueden hacer más daño que beneficio.

 Michael Murphy