Hay cosas que pasan a nuestro alrededor que no las podemos
controlar, pero teniendo cierto control con las emociones puede disminuir
nuestro malestar. Si se controlan las emociones se puede uno sentir mejor
acerca de la vida, incluso mejor que si se eliminara por completo el
contratiempo.
Para afrontar las adversidades se han considerado dos tipos
de “controles” uno es el “Control Primario” que son las medidas o actitudes que
se toman directamente hacia las circunstancias adversas, o sea ir directamente
al fondo del problema y resolverlo. Y el otro es el “Control Secundario” que a
pesar de que no se pueda quitar por completo el problema o adversidad, se puede
tener la capacidad de respuesta abordando las emociones y ajustándolas.
En algunas ocasiones si tenemos la capacidad de resolver un
problema voluntariamente y lograr un bienestar; esto es el control primario,
pero si no podemos totalmente resolver un problema se debe intentar tener un
autodominio emocional, frente a las adversidades cotidianas.
Constantemente debemos aprender a identificar las
situaciones diversas que se nos presentan y darnos cuenta de lo que si podemos
cambiar, y de lo contrario tener el autodominio emocional, para crear una
situación de bienestar y de felicidad. Una apreciación importante es que la gente con dinero y poder, puede tener una capacidad mejor para tener un “control primario” y tiene poca necesidad de desarrollar un “control secundario”, por lo que no aprenden a tener autodomino de las emociones. En cambio la gente sin dinero no tiene la capacidad para tener un control primario pero desarrollan por necesidad un control secundario. Cuando se desarrolla un mayor control secundario se puede favorecer tener un mayor control primario.
Para lograr el control secundario lo importante es reconocer el tipo de problema, pero hay muchos métodos para llegar a tener “calma” y “tranquilidad”, por ejemplo la meditación ya sea religiosa o no, puede ser de gran ayuda para abordar los problemas cotidianos, y cualquier intento de tener calma conducirá a una experiencia más positiva en la vida. Esto muchos lo han considerado como la verdadera “felicidad”.
Hay múltiples investigaciones que muestran que hay una gran
cantidad de padecimientos que se pueden disminuir mediante el control de las
emociones. Utilizando placebos y cambiando las actitudes y expectativas se
pueden reducir o eliminar los síntomas de ansiedad, depresión, migrañas, asma,
epilepsia, enfermedad de Crohn, hipertensión arterial, trastornos de la alimentación
e inclusiva la propia enfermedad de Parkinson. Por lo tanto de hecho es posible
cambiar radicalmente los “sentimientos” y “emociones”.
“Si usted no puede controlar lo que le sucede, usted puede
controlar cómo se siente al respecto”,
Cuando se tiene una pareja, o cuando se vive en matrimonio,
por lo general el solo hecho de compartir las situaciones y comentarlas
proporciona una mejor manera de solucionar los problemas. Siempre y cuando
exista el apoyo requerido y la comunicación adecuada. Sin embargo en muchos
casos de vida en pareja, uno de los dos reaccionará fuertemente a la
adversidad, con fuertes emociones y catastrofismo, y el otro podrá mantener la
calma más fácilmente. Por lo que es mejor aprender a manejar las propias
reacciones sin esperar la ideal armonía que debería existir.
De cualquier manera gran parte de la vida es gris, no es
blanca ni negra. No estamos totalmente tristes ni totalmente contentos, pero
tenemos que luchar para examinar la vida y sentir la contienda es estar vivos.
MICHAEL MURPHY
No hay comentarios.:
Publicar un comentario